jueves, 28 de febrero de 2013

El recuerdo determina nuestras decisiones

Bienvenidos una vez más a mi Blog, hoy me gustaría hablar de un tema interesante del que he estado leyendo y me parece fascinante, ¿a que me refiero con éste título? Nuestras decisiones muchas veces dependen del recuerdo que nos hayan dejado la última vez... y esto se puede extrapolar a todos los ámbitos de la vida.

Una prueba si por ejemplo nos dieran 2 opciones:

* Meternos durante 30 segundos en una piscina helada
*Meternos 90 segundos en una piscina, pero durante los últimos 30 segundos la temperatura de ésta piscina subirá, es decir, el agua estará más caliente

¿Qué opción cogerías? Lo más probable es que escojas la primera opción, porque tu persona siempre se irá a por la opción en la que menos sufrimiento haya y por lo tanto la de menor duración. Pues bien, si realmente hicieras estás 2 opciones a posteriori la mayoría de la gente escogería la segunda opción a la primera ¿ Por qué? Pues principalmente porque el recuerdo que deja la segunda opción es mucho más satisfactorio que el 1º, ya que la segunda durante los últimos 30 segundos sentimos esa sensación de bienestar, sin embargo, en la otra opción no sucede así.

Esto se puede llevar a otros ámbitos como dije anteriormente, si por ejemplo somos inversores en La Bolsa y compramos acciones, tenemos 2 tipos de acciones, las llamaremos A y B... El precio de A cuando la compramos era de 10 y ha ido disminuyendo con el tiempo hasta 7, de manera progresiva, sabiendo ya de antemano que cuando la vendamos tendremos una pérdida. Sin embargo, existe la acción B que cuando la compramos valía 12 y se mantuvo hasta días antes de venderlas, que se produjo una caída hasta 8. Bien aunque con la acción B ganemos más que con A, nuestro recuerdo es peor acerca de la acción B debido a la caída estrepitosa que sufrió a finales.

Por tanto esto demuestra que el recuerdo de los sucesos determina nuestras decisiones, a veces de manera errónea porque con la acción A hemos ganado menos que con la B, pero el siguiente año estaríamos más dispuestos a comprar acciones del tipo A en vez de acciones del tipo B.

¿Qué opináis?


Paula Rojas Blanca 

lunes, 25 de febrero de 2013

Irracionalidad cotidiana

Bienvenidos un día más a mi Blog, en estos momentos me estoy leyendo "Economía emocional" de Matteo Motterlini y he visto ya varias cosas dentro de éste libro que me gustaría comentar y hablar acerca de este tema.

Un tema es la actitud en relación con el arrepentimiento, esto que voy a comentar sirve con cualquier aspecto de nuestra vida, emocional, económico, social... La actitud en relación con el arrepentimiento cambia con  el tiempo. En un período breve de tiempo días o semanas, nos lamentamos más por las cosas hechas o realizadas, siempre estamos diciendo y si no hubiera hecho esto ¿ qué hubiera pasado? A corto plazo nos parece una mala elección. 
Sin embargo, en un período a largo plazo nos arrepentimos de aquellas cosas que no hicimos, siempre pensamos ¿ y si hubiera hecho esto? diciéndonos a nosotros mismos que hubo oportunidades que no supimos aprovechar en su momento. 

Por tanto hacer una reflexión persona, y pensad ¿ de que te arrepientes en los últimos meses? lo más probable es que sean una decisión particular que le ha llevado a una situación no deseada, sin embargo pensad en aquello que lamentáis de vuestra vida... ¿ya? Lo más probable es que hayas pensado en algo que no hiciste en su momento y que podrías haber realizado. 

Todas estos factores emocionales dentro de nuestro organismo afectan directamente a nuestro comportamiento económico, es lo que de cierta manera intentan mostrar en éste libro, la verdad es que por lo que llevo leído lo recomiendo, para aquellos que os interese éste tipo de temas. 

"Darnos cuenta que decidir no decidir, es en sí, una decisión" 




Paula Rojas Blanca